Las hormigas no bostezan como los humanos. Si bien las hormigas pueden exhibir comportamientos similares a los bostezos, como estirar las mandíbulas o batir las alas, estos no son verdaderos bostezos. El bostezo es un comportamiento caracterizado por la apertura de la boca y la inhalación profunda de aire, que se asocia principalmente con la somnolencia y la fatiga en los humanos. El verdadero bostezo no ha sido observado ni documentado científicamente en las hormigas.