¿Qué causa ardor y picazón en el área vaginal?

Varios factores pueden provocar ardor y picazón en la zona vaginal:

1. Infecciones:

- Infección por Hongos (Candidiasis): Un crecimiento excesivo del hongo Candida puede causar picazón vaginal, ardor y una secreción espesa, blanca e inodoro.

- Vaginosis bacteriana (VB): Un desequilibrio entre bacterias sanas y dañinas en la vagina puede provocar VB. Los síntomas incluyen picazón, ardor, una secreción fina, blanca o gris y olor a pescado.

- Tricomoniasis: La tricomoniasis, una infección de transmisión sexual causada por un parásito, puede causar picazón y ardor vaginal intenso, dolor al orinar y manchas parecidas a fresas en las paredes vaginales.

2. Condiciones de la piel:

- Dermatitis atópica (eccema): Esta afección crónica de la piel puede afectar el área genital y provocar piel seca, picazón e inflamación.

- Liquen Escleroso: Un trastorno crónico de la piel caracterizado por manchas blancas, finas y arrugadas en la vulva. La picazón y el ardor son síntomas comunes.

3. Reacciones alérgicas:

- Dermatitis de contacto: Algunas personas pueden tener una reacción alérgica a ciertos productos que se aplican en el área vaginal, como jabones, detergentes, espermicidas o aerosoles de higiene femenina.

4. Menopausia:

- A medida que los niveles de estrógeno disminuyen durante la menopausia, el tejido vaginal se vuelve más fino y seco, lo que provoca picazón y ardor.

5. Vulvodinia:

- Una condición de dolor crónico caracterizada por dolor vulvar persistente, ardor y malestar, sin una causa identificable.

6. ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual):

- Además de la tricomoniasis, otras ETS como el virus del herpes simple y el virus del papiloma humano (VPH) pueden provocar picazón y ardor genital.

7. Mala higiene:

- La falta de una higiene adecuada y el cambio poco frecuente de toallas sanitarias o tampones pueden crear un ambiente húmedo que promueve el crecimiento de bacterias y hongos, provocando picazón y ardor.

Si siente ardor y picazón en el área vaginal, es importante consultar a un médico para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. No se recomienda el autodiagnóstico ni el tratamiento.