¿Qué es la remisión de la leucemia mieloide aguda?

En el contexto de la leucemia mieloide aguda (LMA), la remisión se refiere a la desaparición completa de todas las células leucémicas detectables en la médula ósea y la sangre, así como la resolución de cualquier síntoma asociado. Es un hito esencial en el tratamiento de la AML, ya que marca el punto en el que la enfermedad ya no progresa activamente.

La remisión completa (RC) se define como la ausencia de blastos o células leucémicas en la médula ósea y la sangre periférica, y la restauración de la hematopoyesis normal (producción de células sanguíneas). Esta evaluación se basa en un examen exhaustivo de la médula ósea, que incluye citología y citometría de flujo, así como hemogramas y otras pruebas relevantes.

El logro de la remisión en la AML es crucial, ya que mejora significativamente el pronóstico y la supervivencia general de los pacientes. Permite opciones de tratamiento adicionales, como el trasplante de células madre hematopoyéticas (TCMH), que potencialmente puede curar la enfermedad. Sin embargo, es importante señalar que la remisión no equivale a la curación, ya que el riesgo de recaída persiste. Es necesario un control y una atención de seguimiento regulares para detectar y controlar cualquier signo de recurrencia.