¿Qué tienen todos los tipos de cáncer en común?
El cáncer se caracteriza por el crecimiento y la división descontrolados de células anormales en el cuerpo. Estas células pueden formar tumores, que pueden interferir con la función de órganos y tejidos y pueden extenderse a otras partes del cuerpo.
Cambios genéticos
Las células cancerosas tienen cambios genéticos que les permiten crecer y dividirse sin control. Estos cambios pueden ocurrir en genes que controlan el crecimiento celular, la muerte celular y la reparación del ADN.
Formación de vasos sanguíneos
Las células cancerosas a menudo estimulan el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos, que suministran oxígeno y nutrientes al tumor y lo ayudan a crecer y extenderse.
Invasión de tejidos circundantes
Las células cancerosas pueden invadir y destruir los tejidos circundantes, incluidas las células sanas. Esto puede provocar dolor, sangrado y disfunción orgánica.
Metástasis
Las células cancerosas pueden propagarse a otras partes del cuerpo a través de la sangre o el sistema linfático. Este proceso se llama metástasis y es la causa más común de muerte en pacientes con cáncer.
Evitación del sistema inmunológico
Las células cancerosas pueden evitar la detección y destrucción por parte del sistema inmunológico. Esto les permite crecer y propagarse sin control.