¿Comer pescado crudo aumenta las posibilidades de padecer cáncer de estómago?

Comer pescado crudo por sí solo no aumenta directamente las posibilidades de padecer cáncer de estómago. Sin embargo, ciertos factores asociados con el consumo de pescado crudo pueden aumentar el riesgo, particularmente cuando el pescado está contaminado con parásitos específicos o se consume con frecuencia sin la preparación adecuada.

El cáncer de estómago está relacionado principalmente con una infección causada por una bacteria llamada Helicobacter pylori (H. pylori). Si bien el pescado crudo no alberga H. pylori, una cocción inadecuada del pescado o la contaminación cruzada durante la preparación con utensilios o superficies contaminadas con H. pylori pueden aumentar el riesgo de infección. La infección por H. pylori es un factor de riesgo importante para desarrollar cáncer de estómago.

Además, algunas especies de pescado crudo pueden portar parásitos o gusanos que pueden causar una infección conocida como anisakiasis. El consumo de pescado crudo o poco cocido infectado con estos parásitos puede provocar dolor abdominal, náuseas, vómitos e incluso obstrucción intestinal. Aunque generalmente no está directamente relacionada con el cáncer de estómago, la inflamación crónica causada por este tipo de infecciones parasitarias podría contribuir potencialmente a un mayor riesgo de desarrollar cáncer gástrico.

Sin embargo, es esencial tener en cuenta que comer pescado crudo de fuentes acreditadas y adoptar prácticas seguras de manipulación de alimentos puede reducir significativamente la probabilidad de infecciones. Cocinar bien o congelar el pescado a temperaturas específicas y durante períodos adecuados puede eliminar bacterias y parásitos dañinos. Seguir las pautas recomendadas al preparar y consumir pescado crudo es fundamental para garantizar la seguridad y mitigar cualquier riesgo potencial. Si tiene dudas, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud.