¿Qué puedes hacer si te duele la garganta?
Haga gárgaras con agua salada tibia: El agua salada ayuda a reducir la inflamación y calmar los tejidos irritados de la garganta. Mezcle de media a una cucharadita de sal en ocho onzas de agua tibia y haga gárgaras durante 30 segundos, repitiendo cada pocas horas.
Manténgase hidratado: Beber suficientes líquidos ayuda a diluir la mucosidad, manteniendo la garganta húmeda y previniendo la sequedad. Elija líquidos calmantes como agua tibia, té y caldos.
Utilice un humidificador: Un humidificador agrega humedad al aire, lo que puede ayudar a aliviar la garganta seca y con picazón. Úsalo en tu dormitorio, especialmente por la noche.
Chupar pastillas o caramelos duros: Estos pueden proporcionar un alivio temporal al estimular la producción de saliva y aliviar el malestar de garganta.
Evite irritantes: Los irritantes comunes como el humo del cigarrillo, el polvo, la contaminación del aire y los alimentos picantes o ácidos pueden empeorar el dolor de garganta. Minimice la exposición a estos desencadenantes si es posible.
Remedio de Miel y Limón: Mezcla dos cucharadas de miel con una cucharada de jugo de limón en agua tibia. La miel tiene propiedades calmantes y antibacterianas, mientras que el jugo de limón aporta vitamina C.
Tés de hierbas: Los tés de manzanilla, menta o jengibre tienen efectos calmantes sobre la garganta. Puedes agregar miel para un alivio adicional.
Descanso: El descanso adecuado permite que el cuerpo se recupere y se concentre en la curación.
Si su dolor de garganta dura más de una semana o es intenso, consulte a un médico. Pueden determinar la causa subyacente y recomendar tratamientos adecuados, incluidos antibióticos si se trata de una infección bacteriana.