¿Qué son las várices esofágicas?

Las várices esofágicas son venas dilatadas y tortuosas en el esófago. Son causadas por un aumento de presión en la vena porta, que es la vena principal que transporta sangre desde los intestinos, el bazo y el páncreas hasta el hígado. Cuando la vena porta se bloquea o se estrecha, la sangre regresa a las venas más pequeñas del esófago, lo que hace que se hinchen y se conviertan en várices.

Las várices esofágicas pueden ser peligrosas porque pueden romperse y sangrar. Esto puede provocar una pérdida grave de sangre e incluso la muerte. El sangrado por varices es más común en personas con cirrosis, que es una enfermedad hepática crónica.

Existen varios tratamientos para las várices esofágicas, que incluyen medicamentos, terapia endoscópica y cirugía. El objetivo del tratamiento es prevenir el sangrado y sus complicaciones.