¿Cómo se trata el derrame pleural?

El tratamiento del derrame pleural depende de la causa subyacente y la gravedad de la afección. A continuación se muestran algunos enfoques de tratamiento comunes:

1. Toracocentesis:en los casos en que la acumulación de líquido esté causando síntomas importantes, se realiza una toracocentesis. Consiste en insertar una aguja en el espacio pleural para drenar el exceso de líquido. Esto proporciona alivio de los síntomas y permite realizar pruebas de diagnóstico del líquido pleural.

2. Diuréticos:si el derrame pleural es causado por una insuficiencia cardíaca o renal subyacente que provoca retención de líquidos, se pueden recetar diuréticos. Estos medicamentos ayudan a aumentar la producción de orina y reducir la acumulación de líquido en el cuerpo, incluido el espacio pleural.

3. Antibióticos:si el derrame pleural es el resultado de una infección (empiema), se recetan antibióticos según el organismo causante identificado. Los antibióticos son cruciales para eliminar la infección y prevenir complicaciones.

4. Drenaje y Decorticación:En casos de derrame pleural complicado, como empiema con loculaciones o tejido pulmonar atrapado, puede ser necesaria una intervención quirúrgica. El drenaje implica insertar un tubo o catéter para drenar el líquido y permitir que el pulmón se vuelva a expandir. La decorticación es un procedimiento en el que se elimina el revestimiento pleural engrosado e inflamado para facilitar la expansión pulmonar.

5. Pleurodesis:En determinadas situaciones, se puede realizar pleurodesis. Consiste en introducir una sustancia irritante en el espacio pleural, provocando inflamación y adherencia entre las capas pleurales. Esto evita la reacumulación de líquido en el espacio pleural.

6. Tratamiento de la condición subyacente:si el derrame pleural es un síntoma de otra condición médica subyacente, como cáncer o enfermedad hepática, la condición primaria requiere tratamiento. Abordar la causa subyacente es esencial para controlar el derrame pleural de forma eficaz.

7. Oxigenoterapia:Se puede proporcionar oxígeno suplementario si el derrame pleural afecta la respiración y causa desaturación de oxígeno.

8. Monitoreo y seguimiento:un monitoreo estrecho es esencial para evaluar la respuesta al tratamiento y detectar cualquier complicación. Se pueden realizar radiografías de tórax periódicas y otras pruebas de diagnóstico para evaluar el progreso del derrame pleural.