¿Qué significa cuando te duele la espalda y cada vez que tienes que ir al baño te orinas un poco encima?
1. Infección del tracto urinario (ITU):
- Una ITU puede provocar dolor de espalda, especialmente en mujeres. Cuando la infección llega a los riñones, puede provocar dolor en la espalda y los costados. La incontinencia también puede ocurrir debido a la irritación e inflamación causada por la infección.
2. Cálculos renales:
- Los cálculos renales pueden alojarse en los uréteres, que son los conductos que transportan la orina desde los riñones hasta la vejiga. Esto puede causar dolor de espalda intenso y también provocar incontinencia urinaria debido a la obstrucción.
3. Problemas de próstata:
- En los hombres, una próstata agrandada puede presionar la uretra, el conducto que transporta la orina fuera del cuerpo. Esto puede causar dificultad para orinar, dolor de espalda e incontinencia.
4. Problemas neurológicos:
- Ciertas afecciones neurológicas, como lesiones de la médula espinal, esclerosis múltiple o enfermedad de Parkinson, pueden afectar los nervios que controlan la vejiga y provocar dolor de espalda e incontinencia.
5. Embarazo:
- Durante el embarazo, el útero en crecimiento puede ejercer presión sobre la vejiga y la zona lumbar, provocando dolor de espalda e incontinencia ocasional, especialmente en las últimas etapas.
6. Parto:
- El parto vaginal a veces puede debilitar los músculos que controlan el flujo de orina, provocando incontinencia temporal o persistente.
7. Prolapso de órganos pélvicos:
- Esta afección ocurre cuando los músculos del piso pélvico se debilitan, lo que hace que la vejiga, el útero o el recto bajen de sus posiciones normales. Puede provocar dolor de espalda e incontinencia urinaria.
Es fundamental consultar a un profesional de la salud si tiene dolor de espalda e incontinencia urinaria. El médico puede realizar un examen físico, ordenar las pruebas adecuadas (como análisis de orina, estudios de imagen o pruebas neurológicas) y brindar el tratamiento necesario según la causa subyacente. No se recomienda el autotratamiento, ya que puede empeorar los síntomas o retrasar la atención médica adecuada.