Se deben utilizar tanto el hemisferio izquierdo como el derecho del cerebro para un aprendizaje integral. Mientras que el hemisferio izquierdo suele asociarse con el razonamiento lógico y el pensamiento crítico, el hemisferio derecho es responsable del pensamiento más creativo y abstracto. Al involucrar ambos hemisferios, los estudiantes pueden obtener una comprensión más integral del material y desarrollar su capacidad de pensar de manera crítica y creativa.