¿Cómo afecta la polio al sistema musculoesquelético?
Efectos sobre el sistema musculoesquelético
La polio puede afectar el sistema musculoesquelético de varias maneras. El efecto más común es la debilidad muscular, que puede variar de leve a grave. La debilidad muscular puede provocar dificultad para caminar, pararse y subir escaleras. En casos severos, puede incluso causar parálisis.
La polio también puede causar dolor, rigidez y deformidades en las articulaciones. Estos problemas suelen ser causados por el daño a los nervios que controlan los músculos alrededor de las articulaciones. En algunos casos, las articulaciones pueden sufrir daños permanentes.
Tratamiento
No existe cura para la polio, pero la enfermedad se puede prevenir con una vacuna. La vacuna contra la polio es una de las vacunas más eficaces disponibles y es muy recomendable para todo el mundo.
El tratamiento de la polio se centra en aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. La fisioterapia puede ayudar a fortalecer los músculos debilitados y mejorar la flexibilidad. La terapia ocupacional puede ayudar a las personas a aprender a realizar las tareas cotidianas a pesar de sus discapacidades. Puede ser necesaria la cirugía para corregir deformidades o mejorar la función.
Pronóstico
El pronóstico para las personas con polio depende de la gravedad de sus síntomas. La mayoría de las personas que padecen polio leve se recuperan por completo. Sin embargo, las personas que padecen polio grave pueden tener discapacidades permanentes.
Prevención de la polio
La mejor manera de prevenir la polio es vacunarse. La vacuna contra la polio está disponible en dos formas:oral e inyectable. La vacuna oral contra la polio se administra en un terrón de azúcar, mientras que la vacuna inyectable contra la polio se administra en forma de inyección. La vacuna oral contra la polio se usa más comúnmente en los Estados Unidos.
La vacuna contra la polio es muy segura y eficaz. Se recomienda que todas las personas se vacunen contra la polio, independientemente de su edad.