Me diagnosticaron sífilis, recibí mi primer tratamiento y desde entonces he podido controlar todo el día. ¿Qué está pasando? ¿Quieres llamar al médico?
La sífilis es una infección de transmisión sexual que puede causar una amplia gama de síntomas, que incluyen sarpullido, fiebre, dolor de garganta e inflamación de los ganglios linfáticos. Si no se trata, la sífilis puede provocar graves problemas de salud, como ceguera, parálisis y muerte.
El tratamiento para la sífilis consiste en una serie de inyecciones de penicilina. La penicilina es un antibiótico muy eficaz y, por lo general, cura la sífilis por completo. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios de la penicilina, como sarpullido, picazón y náuseas. El vómito no es un efecto secundario común de la penicilina.
Si vomita después de recibir penicilina para la sífilis, es importante que llame a su médico de inmediato. El vómito podría ser un signo de una afección más grave, como una reacción alérgica a la penicilina o un problema gastrointestinal.
Su médico podrá evaluarlo y determinar la causa de sus vómitos. También podrán recomendar el mejor curso de tratamiento.