Esta afirmación no es del todo cierta. Si bien el abuso de alcohol es un problema grave y puede provocar un trastorno por consumo de alcohol (AUD), es importante tener en cuenta que no todas las personas que beben alcohol desarrollarán AUD. El desarrollo del AUD está influenciado por varios factores, incluida la genética, las influencias ambientales y las elecciones personales. Algunas personas pueden ser más susceptibles a desarrollar AUD debido a factores genéticos o ciertos rasgos de personalidad, mientras que otras pueden participar en conductas de consumo de alcohol riesgosas debido a factores externos como el estrés o la presión de grupo. Es inexacto suponer que uno de cada diez bebedores se convertirá en alcohólico.