Las personas ciegas no pueden tener alucinaciones visuales debido a la pérdida total de la vista. Las alucinaciones son experiencias vívidas y realistas que implican la percepción de cosas que no existen. A menudo se asocian con trastornos psicológicos, afecciones neurológicas o consumo de sustancias. Dado que su madre es ciega, es poco probable que experimente apariciones visuales.