¿Cómo afecta el VIH SIDA al cuerpo humano?
1. Infección aguda (enfermedad por seroconversión) :
- Entre 2 y 6 semanas después de la infección inicial, algunas personas experimentan una enfermedad breve conocida como enfermedad de seroconversión o infección aguda por VIH. Los síntomas pueden incluir fiebre, sarpullido, dolor de garganta e inflamación de los ganglios linfáticos. Esta fase suele durar unas semanas y puede confundirse con otras enfermedades.
2. Fase crónica (latencia clínica):
- Tras la infección inicial, el virus entra en una fase crónica que puede durar varios años. Durante este período, es posible que las personas no experimenten ningún síntoma o enfermedad notable, pero el virus continúa multiplicándose y dañando el sistema inmunológico.
3. SIDA (Etapa Avanzada):
- A medida que la infección por VIH avanza y debilita el sistema inmunológico, llega a la etapa avanzada conocida como SIDA. Esto ocurre cuando el recuento de células T CD4+ (un tipo de glóbulo blanco crucial para la defensa inmunológica) cae por debajo de cierto nivel. Las personas con SIDA son muy susceptibles a infecciones oportunistas y ciertos cánceres.
Efectos del VIH en el cuerpo:
- Sistema Inmunitario: El VIH ataca y destruye principalmente las células T CD4+, que desempeñan un papel vital en la lucha contra las infecciones. Esto debilita la capacidad del cuerpo para combatir infecciones y enfermedades, lo que hace que las personas con VIH sean más vulnerables a infecciones y cánceres oportunistas.
- Infecciones oportunistas: Debido al sistema inmunológico debilitado, las personas con VIH tienen un mayor riesgo de desarrollar una amplia gama de infecciones oportunistas. Estas infecciones pueden incluir neumonía, tuberculosis, infecciones por hongos como candidiasis y meningitis criptocócica, infecciones parasitarias como toxoplasmosis y criptosporidiosis, y muchas más.
- Cánceres: Las personas con VIH también tienen más probabilidades de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el sarcoma de Kaposi (un cáncer de piel), el linfoma no Hodgkin (un cáncer del sistema linfático) y el cáncer de cuello uterino. Estos cánceres ocurren con mayor frecuencia y agresividad en personas con VIH.
- Complicaciones neurológicas: El VIH puede afectar el sistema nervioso y provocar una variedad de complicaciones neurológicas conocidas como trastornos neurocognitivos asociados al VIH (HAND). Estos pueden incluir problemas de memoria, dificultades con la concentración y la toma de decisiones, problemas de coordinación motora y cambios de comportamiento.
- Síndrome de emaciación: En etapas avanzadas del VIH, las personas pueden experimentar síndrome de emaciación, caracterizado por una pérdida de peso significativa, agotamiento muscular y debilidad. Esto suele estar asociado con diarrea crónica, desnutrición e infecciones oportunistas.
- Otros síntomas: La infección por VIH también puede causar síntomas persistentes como fatiga, sudores nocturnos, ganglios linfáticos inflamados, aftas orales (una infección por hongos en la boca), dolores de cabeza y erupciones cutáneas.
Es importante señalar que con la atención médica adecuada, incluida la terapia antirretroviral (TAR), las personas con VIH pueden controlar su afección y vivir vidas más largas y saludables. El diagnóstico y el tratamiento tempranos son cruciales para frenar la progresión de la enfermedad y prevenir complicaciones.