¿Cómo se puede curar el VIH?

Actualmente, la infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) no se considera curable en el sentido tradicional. Si bien se han logrado algunos avances en el manejo y control del virus, el enfoque más común para tratar el VIH se conoce como terapia antirretroviral (TAR).

El TAR implica tomar una combinación de medicamentos diariamente para suprimir la replicación del VIH en el cuerpo. Esto ayuda a reducir la cantidad de virus en el torrente sanguíneo, fortalece el sistema inmunológico y retarda la progresión de la enfermedad. Como resultado, las personas que viven con el VIH que reciben y siguen el tratamiento antirretroviral pueden tener una esperanza de vida casi normal y mantener una buena calidad de vida.

Es importante señalar que, si bien el TAR puede controlar eficazmente el VIH, no elimina el virus del cuerpo por completo. El virus permanece presente en ciertos reservorios dentro del cuerpo, lo que dificulta lograr una cura completa. Por lo tanto, es necesario el cumplimiento continuo del TAR para mantener el control de la infección.

Investigadores de todo el mundo continúan trabajando en posibles estrategias para lograr una cura para el VIH. Un área de investigación activa se conoce como "cura funcional" o "cura esterilizante". Una cura funcional tiene como objetivo lograr la supresión viral a largo plazo sin la necesidad continua de TAR. Sin embargo, es crucial reconocer que una cura completa que erradique por completo el virus del cuerpo sigue siendo una búsqueda científica en curso y aún no está a nuestro alcance.

Sin embargo, los avances en la investigación, como el caso del "Paciente de Berlín" y los ensayos clínicos en curso que utilizan terapias innovadoras, ofrecen esperanzas sobre la posibilidad de una cura para el VIH en el futuro.