¿Cómo ataca el VIH a su sistema inmunológico?

El VIH ataca principalmente a un tipo de glóbulo blanco conocido como célula T CD4+, también conocida como célula T auxiliar, que desempeña un papel central en la defensa inmunitaria del cuerpo contra las infecciones. A continuación se ofrece una descripción general de cómo el VIH ataca el sistema inmunológico:

1. Infección de células T CD4+:

- El VIH ingresa al cuerpo a través del contacto con fluidos corporales infectados, como sangre, semen, fluidos vaginales o leche materna.

- El virus ataca principalmente a las células T CD4+ porque tienen un receptor en su superficie llamado CD4, que el VIH utiliza para unirse y entrar en las células.

2. Replicación del virus:

- Una vez dentro de una célula T CD4+, el VIH utiliza la maquinaria de la célula para hacer copias de sí mismo. Específicamente, el material genético (ARN) del virus se transcribe inversamente en ADN mediante una enzima llamada transcriptasa inversa, y luego el ADN viral se integra en el propio ADN de la célula huésped.

- Durante el proceso de replicación, se producen nuevas copias del VIH que luego son liberadas desde la célula infectada al torrente sanguíneo.

3. Propagación de la infección:

- Los viriones del VIH recién producidos pueden infectar otras células T CD4+, así como otros tipos de células inmunes como macrófagos y células dendríticas.

- Cada célula infectada puede liberar miles de nuevas partículas virales, lo que provoca una rápida propagación del virus por todo el cuerpo.

4. Agotamiento de las células T CD4+:

- A medida que el VIH continúa infectando y destruyendo las células T CD4+, la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones se debilita. Una persona sana suele tener un recuento de células T CD4+ de varios cientos a mil células por milímetro cúbico de sangre. A medida que avanza la infección por VIH, el recuento de células T CD4+ disminuye.

- Cuando el recuento de células T CD4+ cae por debajo de un cierto nivel (normalmente menos de 200 células/mm³), el sistema inmunológico queda gravemente comprometido y se considera que la persona tiene SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).

En resumen, el VIH ataca y destruye las células T CD4+, las células inmunes críticas responsables de coordinar y apoyar las respuestas inmunes contra las infecciones. A medida que disminuye la cantidad de células T CD4+, el cuerpo se vuelve más susceptible a una amplia gama de infecciones oportunistas, cánceres y otras complicaciones asociadas con el SIDA.