¿Qué tan baja puede ser la temperatura de tu cuerpo antes de morir?
La hipotermia ocurre cuando el cuerpo pierde calor más rápido de lo que puede producirlo. Generalmente es causada por la exposición a temperaturas extremadamente frías, inmersión prolongada en agua fría o ropa inadecuada en ambientes fríos. El cuerpo humano puede soportar cierto grado de pérdida de temperatura, pero alcanzar temperaturas corporales críticamente bajas puede poner en peligro la vida.
La gravedad de la hipotermia está determinada por la magnitud de la caída de temperatura. Generalmente, la temperatura corporal central, que es la temperatura de los órganos internos, debe descender sustancialmente para que una persona muera. Los profesionales médicos consideran una temperatura corporal central inferior a 35 °C (95 °F) como un caso grave de hipotermia.
Cuando la temperatura corporal desciende a alrededor de 32 °C (89,6 °F) o menos, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria y las funciones metabólicas comienzan a disminuir drásticamente. La persona puede perder el conocimiento y entrar en un estado de hipotermia profunda. En esta etapa, los órganos vitales comienzan a funcionar mal y el cuerpo lucha por mantener la circulación sanguínea y la respiración.
La hipotermia puede provocar un paro cardíaco, coma y, finalmente, la muerte si no se proporciona tratamiento médico oportuno. Cuando la temperatura corporal central de una persona cae por debajo de 30°C (86°F), las posibilidades de supervivencia disminuyen significativamente y el riesgo de muerte aumenta.
Por lo tanto, es fundamental reconocer los signos y síntomas de la hipotermia y buscar atención médica inmediata para prevenir complicaciones graves y una posible muerte.