¿Por qué crees que la formación del endospermo no ocurre hasta que se produce la fertilización?
Doble fertilización:en las angiospermas, el proceso de fertilización implica dos fertilizaciones. Un espermatozoide se fusiona con el óvulo para formar el cigoto, que se desarrolla hasta convertirse en el embrión. El otro espermatozoide se fusiona con dos núcleos polares en la célula central del saco embrionario, dando como resultado una célula triploide conocida como célula madre del endospermo o célula del endospermo primario (PEC).
Activación del desarrollo del endospermo:la fusión del espermatozoide con los núcleos polares desencadena la activación del desarrollo del endospermo. La PEC sufre divisiones mitóticas para producir múltiples núcleos libres o un endospermo celular, según la especie de planta.
Función nutritiva del endospermo:el endospermo sirve principalmente como un tejido rico en nutrientes que nutre al embrión en desarrollo. Almacena materiales de reserva como almidón, proteínas y lípidos que son esenciales para el crecimiento del embrión antes y durante la germinación de las semillas. El endospermo también proporciona protección al embrión dentro de la semilla.
Regulación por hormonas vegetales:la fertilización provoca cambios hormonales dentro del saco embrionario y los tejidos circundantes. Estas señales hormonales, incluidas las auxinas, las citoquininas y las giberelinas, desempeñan un papel crucial en la regulación del desarrollo del endospermo. Los cambios hormonales inducidos por la fertilización estimulan la división y diferenciación de las células del endospermo, asegurando el correcto desarrollo del endospermo.
Sincronización del desarrollo del embrión y del endospermo:vincular la formación del endospermo con la fertilización garantiza el desarrollo coordinado del embrión y el endospermo. El crecimiento y la maduración del embrión y el endospermo están estrechamente sincronizados para satisfacer las necesidades nutricionales del embrión en desarrollo y preparar la semilla para su dispersión y germinación.
Al acoplar la formación del endospermo con la fertilización, las angiospermas aseguran la disponibilidad de nutrientes para el desarrollo del embrión, sincronizan el crecimiento de ambos tejidos y protegen al embrión dentro de la semilla.