¿Cómo puede nacer una persona sin vesícula biliar?

La ausencia congénita de vesícula biliar (CAOG) es una afección poco común en la que una persona nace sin vesícula biliar. Ocurre cuando la vesícula biliar no logra desarrollarse durante el desarrollo fetal. El CAOG suele ser asintomático y no requiere tratamiento. Sin embargo, en algunos casos puede provocar complicaciones como cálculos biliares o discinesia biliar.

La vesícula biliar es un pequeño órgano ubicado en la parte inferior del hígado. Almacena bilis, que es un líquido que ayuda a digerir las grasas. La bilis es producida por el hígado y luego transportada a la vesícula biliar, donde se concentra. Cuando una persona ingiere una comida, la vesícula biliar se contrae y libera bilis en el intestino delgado.

En las personas con CAOG, la bilis fluye directamente desde el hígado hacia el intestino delgado. A veces, esto puede provocar problemas con la digestión, como hinchazón, gases y diarrea. En algunos casos, CAOG también puede provocar cálculos biliares. Los cálculos biliares se forman cuando la bilis se concentra demasiado y forma cristales. Estos cristales luego pueden endurecerse y convertirse en piedras.

Los cálculos biliares pueden causar una variedad de síntomas, que incluyen dolor en la parte superior derecha del abdomen, náuseas y vómitos. En algunos casos, los cálculos biliares también pueden provocar problemas más graves, como pancreatitis o colangitis.

Por lo general, el tratamiento para CAOG no es necesario. Sin embargo, si una persona experimenta síntomas, como cálculos biliares, se puede recomendar un tratamiento. Las opciones de tratamiento pueden incluir medicación, cirugía o una combinación de ambas.