¿En qué plazo se puede realizar una prueba de paternidad?
La prueba de paternidad se puede realizar potencialmente a las 8 semanas de embarazo mediante una prueba de paternidad prenatal no invasiva (NIPT). Este tipo de prueba analiza el ADN libre de células en la sangre de la madre embarazada, que contiene ADN tanto de la madre como del feto. Al secuenciar y analizar este ADN, es posible determinar la paternidad del niño.
Es importante señalar que NIPT no está ampliamente disponible y aún está en desarrollo. Por lo general, se realiza en determinadas situaciones médicas o cuando existen dudas sobre la paternidad del niño. Además, la NIPT puede tener limitaciones y puede no ser concluyente en todos los casos.
Las pruebas de paternidad tradicionales generalmente se realizan después del nacimiento del bebé. Implica analizar muestras de ADN del niño, del presunto padre y, en ocasiones, de la madre. Este tipo de prueba es muy precisa y puede proporcionar resultados concluyentes en la mayoría de los casos.