En octubre de 2007, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) descubrieron ántrax vivo en un almacén que había estado cerrado desde mediados de la década de 1960 en Fort Detrick en Frederick, Maryland. El ántrax vivo estaba contenido en viales de vidrio sellados que pueden remontarse a la Segunda Guerra Mundial.