¿Cuál es el efecto de la neumonía?
La neumonía hace que el tejido pulmonar se inflame e irrite, lo que provoca la acumulación de líquido en los alvéolos. Este proceso, conocido como inflamación, obstruye el flujo de oxígeno al torrente sanguíneo, provocando dificultad para respirar y tos.
2. Dificultad para respirar (disnea)
A medida que los sacos de aire se llenan de líquido, los pulmones luchan por expandirse y contraerse de manera efectiva. Esto provoca dificultad para respirar (disnea), lo que hace que las personas respiren más rápido y menos profundamente.
3. Fiebre
En respuesta a la infección, el sistema inmunológico del cuerpo eleva la temperatura corporal, lo que provoca fiebre. La fiebre es un síntoma común de la neumonía y puede variar de leve a alta, según la gravedad de la infección.
4. Tos
La tos es un mecanismo de defensa natural para expulsar la mucosidad, las bacterias y los desechos de los pulmones. Durante la neumonía, la tos puede ser seca o producir esputo espeso, verdoso o de color óxido.
5. Escalofríos y dolores corporales
Los escalofríos y los dolores corporales suelen acompañar a la neumonía, especialmente durante las primeras etapas. Estos síntomas están asociados con la respuesta inmune del cuerpo a la infección.
6. Dolor en el pecho
El dolor o malestar en el pecho es otro síntoma frecuente. El dolor de pecho a menudo empeora con la tos o la respiración profunda.
7. Pérdida de apetito
Durante una infección, el cuerpo puede priorizar la conservación de energía y desviar recursos para combatir la enfermedad. Esto puede provocar pérdida de apetito o disminución de la ingesta de alimentos.
8. Fatiga y debilidad
La fatiga y la debilidad son complicaciones comunes de la neumonía. Las personas con neumonía pueden sentirse extremadamente cansadas, tener bajos niveles de energía y experimentar debilidad muscular.
9. Confusión (en ancianos)
Las personas de edad avanzada pueden experimentar confusión o delirio como resultado de la neumonía. Esto puede deberse a diversos factores, como cambios en los niveles de oxígeno, deshidratación o alteración del estado mental provocada por la infección.
10. Deshidratación
La fiebre, la sudoración y la disminución de la ingesta oral pueden provocar deshidratación, especialmente en poblaciones vulnerables como los niños pequeños y los ancianos.
Es importante tener en cuenta que los síntomas de la neumonía pueden variar según la salud general, la edad y la fortaleza del sistema inmunológico del individuo. Si experimenta síntomas persistentes de neumonía, es fundamental buscar atención médica de inmediato.