¿Qué son los arenavirus (Arenaviridae)?
Los viriones de los arenavirus son aproximadamente esféricos y tienen un diámetro que oscila entre 50 y 300 nanómetros (nm). Poseen una envoltura exterior que está compuesta por una bicapa lipídica derivada de la membrana plasmática de la célula huésped durante la gemación. La envoltura también contiene glicoproteínas responsables de la unión y la entrada a las células huésped.
Dentro del virión, el genoma del arenavirus consta de dos segmentos de ARN lineales monocatenarios designados como segmento grande (L) y segmento pequeño (S). Estos segmentos codifican proteínas esenciales para la replicación, el ensamblaje y la patogénesis viral.
El segmento L transporta la información genética de la ARN polimerasa viral dependiente de ARN (RdRp), que es crucial para la transcripción y replicación viral de los segmentos L y S. Además, el segmento L codifica una nucleoproteína (N) y un precursor de glicoproteína (GPC) que se procesa posteriormente en dos subunidades, GP1 y GP2.
El segmento S codifica la proteína de la matriz viral (Z) y la nucleoproteína (NP), que se asocia con el ARN viral para formar la nucleocápside. La NP desempeña un papel fundamental en el inicio y la regulación de la replicación del genoma.
Los arenavirus se dividen en dos grupos principales:arenavirus del Viejo Mundo y arenavirus del Nuevo Mundo. Los arenavirus del Viejo Mundo, que se encuentran en África, Asia y Europa, incluyen virus como el virus de Lassa, que causa la fiebre de Lassa, y el virus de la coriomeningitis linfocítica (LCMV), un virus no patógeno en humanos pero que es un modelo importante para estudiar inmunología y virología.
Los arenavirus del Nuevo Mundo se encuentran en América e incluyen virus como el virus Junín, el agente causante de la fiebre hemorrágica argentina, y el virus Machupo, responsable de la fiebre hemorrágica boliviana.
Las infecciones por arenavirus pueden manifestarse en una variedad de presentaciones clínicas, desde enfermedades febriles leves hasta fiebres hemorrágicas graves. Los síntomas pueden incluir fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, náuseas, vómitos y trastornos hemorrágicos. La gravedad de la enfermedad y el riesgo de complicaciones hemorrágicas varían según el virus específico.
Los arenavirus se pueden transmitir por contacto con animales infectados o por contacto directo con fluidos corporales o materiales contaminados de personas infectadas. Se sabe que algunos arenavirus, como el virus de Lassa, se transmiten mediante aerosolización.
Las medidas de prevención y control de las infecciones por arenavirus incluyen practicar una buena higiene, evitar el contacto con personas infectadas e implementar estrategias de control de vectores. Hay vacunas disponibles para algunos arenavirus, como la vacuna LCMV utilizada en entornos de investigación y la vacuna contra el virus Junín utilizada en Argentina.
Debido a su potencial para causar enfermedades graves y brotes, los arenavirus se clasifican como patógenos de nivel de bioseguridad 3 (BSL-3) o BSL-4, y requieren instalaciones especiales de manipulación y contención para el trabajo de laboratorio.
En resumen, los arenavirus son virus de ARN monocatenario que pertenecen a la familia Arenaviridae. Pueden causar una variedad de enfermedades, desde enfermedades febriles leves hasta fiebres hemorrágicas graves. Comprender su transmisión, patogénesis y desarrollar estrategias efectivas de prevención y tratamiento son cruciales para controlar las infecciones por arenavirus y mitigar su impacto en la salud pública.