Cuando un virus se apodera de una célula, ¿qué parte de la célula funciona?
- Replicación del ADN o ARN:Los virus a menudo secuestran la maquinaria de replicación de las células huésped para hacer copias de su propio genoma en lugar del material genético del huésped.
- Síntesis de proteínas:el virus puede utilizar el aparato de síntesis de proteínas de la célula huésped para producir proteínas virales, que son esenciales para el ensamblaje de nuevas partículas virales.
- Metabolismo celular:los virus pueden alterar el metabolismo de la célula huésped para favorecer su propia replicación. Por ejemplo, algunos virus inducen a la célula a producir más energía en forma de ATP, que el virus necesita para sus ciclos de replicación.
- Vías de señalización celular:Los virus pueden manipular las vías de señalización celular para evadir el sistema inmunológico o crear un entorno favorable para su replicación. Pueden activar o inhibir vías de señalización específicas para su beneficio.
- Fusión y liberación de membranas:algunos virus utilizan los mecanismos de fusión de membranas de la célula huésped para salir de las células infectadas y propagarse a las células vecinas. Esto puede alterar la integridad de la membrana de la célula huésped y comprometer las funciones celulares.
- Inmunomodulación:Los virus han desarrollado estrategias para evadir las respuestas inmunes del huésped. Pueden producir proteínas que interfieren con el reconocimiento inmunológico, suprimen la actividad de las células inmunitarias o incluso estimulan el sistema inmunológico para su propio beneficio.
- Muerte celular:La infección viral puede provocar la muerte celular a través de diversos mecanismos, entre ellos la apoptosis (muerte celular programada) o la necrosis (muerte celular no regulada). La extensión y el tipo de muerte celular dependen del tipo de virus y de la respuesta de la célula huésped.
Al alterar las funciones celulares, los virus esencialmente reprograman las células huésped para satisfacer sus propias necesidades de replicación y transmisión. Comprender estas alteraciones ayuda a los científicos a desarrollar terapias antivirales dirigidas a funciones virales específicas y proteger a las células huésped del daño.