De hecho, las infecciones de los senos nasales pueden causar sequedad en la boca como uno de sus síntomas. Cuando los senos nasales se inflaman o infectan, pueden producir un exceso de moco, lo que provoca congestión nasal y dificultad para respirar por la nariz. Esto obliga a las personas a respirar por la boca con más frecuencia, lo que provoca sequedad de boca y garganta. Además, algunos medicamentos utilizados para tratar las infecciones de los senos nasales, como los descongestionantes, también pueden contribuir a la sequedad de boca como efecto secundario.