No existe un nivel máximo seguro de glucosa en sangre establecido para realizar una extracción dental, ya que el riesgo de complicaciones depende de una variedad de factores, como la salud general del paciente y el tipo de extracción que se realiza. Sin embargo, la Asociación Dental Estadounidense (ADA) generalmente recomienda posponer los procedimientos dentales electivos en pacientes con diabetes no controlada (niveles de glucosa en sangre superiores a 200 mg/dL) o aquellos con antecedentes de complicaciones diabéticas. En estos pacientes, el riesgo de infección, mala cicatrización de heridas y otras complicaciones aumenta, lo que hace que la extracción del diente sea más desafiante y potencialmente más peligrosa.