¿Cómo sabrás si es fúngico o bacteriano?

Existen varias diferencias clave entre las infecciones por hongos y bacterias que pueden ayudarlo a distinguir entre las dos.

1. Apariencia:

- Las infecciones por hongos suelen tener una apariencia distinta, como por ejemplo:

- Tiña (una mancha redonda, roja y escamosa en la piel)

- Pie de atleta (un sarpullido escamoso y con picazón entre los dedos de los pies)

- Candida (una secreción blanca parecida al requesón que sale de la vagina o la boca)

- Las infecciones bacterianas pueden aparecer como:

- Granos o forúnculos

- Piel enrojecida, hinchada y sensible.

- Pus o secreción del sitio de la infección.

2. Síntomas:

- Las infecciones por hongos suelen provocar:

- Picor

- Escalado

- Enrojecimiento

- Sequedad

- Las infecciones bacterianas pueden provocar:

- Fiebre

- Escalofríos

- Dolores musculares

- Fatiga

- Náuseas y vómitos

3. Ubicación:

- Las infecciones por hongos comúnmente afectan la piel, las uñas, el cabello y las membranas mucosas.

- Las infecciones bacterianas pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo, incluida la piel, los pulmones, el tracto urinario y el torrente sanguíneo.

4. Tratamiento:

- Las infecciones por hongos se tratan con medicamentos antimicóticos.

- Las infecciones bacterianas se tratan con antibióticos.

5. Factores de riesgo:

- Las infecciones por hongos son más comunes en personas con sistemas inmunológicos debilitados, como aquellas con VIH/SIDA, diabetes o cáncer.

- Las infecciones bacterianas son más comunes en personas que tienen heridas abiertas, cortes o quemaduras, o que están expuestas a alimentos o agua contaminados.

Es importante tener en cuenta que algunas infecciones pueden ser causadas tanto por hongos como por bacterias, y puede resultar difícil distinguir entre ambas sin pruebas médicas. Si tiene síntomas de una infección, lo mejor es consultar a un médico para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuado.