¿Por qué una mujer embarazada duerme boca arriba al final del embarazo?
1. Síndrome de hipotensión supina: Dormir boca arriba puede provocar el síndrome de hipotensión supina, que es una afección caracterizada por una disminución de la presión arterial y posibles desmayos. Esto ocurre cuando el útero agrandado ejerce presión sobre los vasos sanguíneos principales, particularmente la vena cava inferior, que es responsable de transportar la sangre desde la parte inferior del cuerpo hasta el corazón. Esta reducción del flujo sanguíneo puede provocar mareos, aturdimiento, náuseas e incluso una reducción del suministro de oxígeno al bebé.
2. Flujo sanguíneo reducido al útero: Dormir boca arriba puede comprimir la vena cava inferior, lo que puede restringir el flujo sanguíneo al útero y la placenta. Este flujo sanguíneo limitado puede provocar un suministro inadecuado de oxígeno y nutrientes al bebé en desarrollo.
3. Dolor de espalda: Dormir boca arriba puede ejercer presión sobre los músculos y ligamentos de la espalda, exacerbando cualquier dolor de espalda preexistente o provocando nuevas molestias. El peso del útero que presiona la columna puede contribuir a aumentar la presión y el dolor en la espalda.
4. Posición fetal: Dormir boca arriba puede hacer que el bebé se mueva hacia una posición posterior, que mira hacia la espalda de la madre en lugar de hacia el frente. Esta posición posterior puede potencialmente hacer que el parto sea más largo y desafiante.
Por lo tanto, se recomienda que las mujeres embarazadas duerman principalmente sobre su lado izquierdo al final del embarazo para evitar los riesgos asociados con dormir boca arriba. Dormir del lado izquierdo ayuda a mejorar el flujo sanguíneo al útero y la placenta, reduce la probabilidad de síndrome de hipotensión supina, alivia las molestias de espalda y promueve la comodidad general tanto para la madre como para el bebé.