Cómo afecta la EM a las mujeres de edad avanzada

La esclerosis múltiple (EM) es una afección neurológica crónica que afecta el sistema nervioso central, incluidos el cerebro, la médula espinal y los nervios ópticos. Es más común en mujeres que en hombres y el riesgo de desarrollar EM aumenta con la edad. Si bien la EM puede afectar a personas de todas las edades, las mujeres mayores de 50 años tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.

A continuación se muestran algunas formas en que la EM puede afectar a las mujeres de edad avanzada:

1. Síntomas físicos :La EM puede causar una variedad de síntomas físicos, que incluyen fatiga, debilidad, entumecimiento u hormigueo en las extremidades, espasmos musculares, temblores, problemas de coordinación y equilibrio, problemas de visión, dificultad para hablar y dificultad para tragar. Estos síntomas pueden dificultar que las mujeres realicen tareas cotidianas y participen en actividades que alguna vez disfrutaron.

2. Deficiencias cognitivas :La EM también puede afectar el funcionamiento cognitivo, provocando problemas de memoria, atención, concentración y toma de decisiones. Estos deterioros cognitivos pueden afectar la capacidad de una mujer para trabajar, administrar sus finanzas o cuidar de sí misma y de su familia.

3. Impacto emocional :Los síntomas físicos y cognitivos de la EM pueden tener un impacto emocional significativo en las mujeres. Pueden experimentar ansiedad, depresión, cambios de humor, irritabilidad y sentimientos de aislamiento. La incertidumbre sobre el curso futuro de la enfermedad y los desafíos de vivir con una enfermedad crónica también pueden afectar el bienestar mental.

4. Impacto en la vida social y familiar :La EM puede afectar la capacidad de una mujer para participar en actividades sociales y mantener relaciones. Los síntomas físicos y cognitivos pueden dificultarle la realización de pasatiempos, la socialización con amigos y familiares o los viajes. Las necesidades de cuidado asociadas con la EM también pueden ejercer presión sobre las relaciones y la dinámica familiar.

5. Consideraciones financieras :La EM puede tener importantes implicaciones financieras para las mujeres y sus familias. Los costos de la atención médica, los medicamentos, los dispositivos de asistencia y la atención a largo plazo pueden ser sustanciales. Además, la EM puede afectar la capacidad de una mujer para trabajar o obtener ingresos, lo que puede provocar dificultades financieras y una menor independencia.

6. Impacto en la sexualidad y la intimidad :La EM puede afectar la función sexual y la intimidad en las mujeres. Los síntomas físicos, como fatiga, debilidad y entumecimiento, pueden dificultar la actividad sexual. Los factores emocionales, como la depresión y la ansiedad, también pueden contribuir a los problemas sexuales.

7. Necesidades sanitarias :A medida que las mujeres con EM envejecen, sus necesidades de atención médica pueden volverse más complejas. Es posible que necesiten un seguimiento y control regulares de sus síntomas de EM, así como exámenes de detección de otras afecciones de salud relacionadas con la edad. Coordinar y gestionar citas y tratamientos de atención médica puede llevar mucho tiempo y ser exigente.

Es importante que las mujeres mayores con EM reciban atención integral e individualizada que aborde sus necesidades físicas, cognitivas, emocionales y sociales. Los chequeos médicos periódicos, las modificaciones en el estilo de vida, el cumplimiento de la medicación y el apoyo de los profesionales de la salud y los cuidadores pueden ayudar a las mujeres a afrontar los desafíos de la EM y mejorar su calidad de vida en general.