Usted está embarazada de 11 años y trabaja con personas mayores. Uno de sus clientes tiene culebrilla. Se preguntaba:¿está bien ponerse en contacto con ella?

Es importante tomar precauciones al trabajar con una clienta con culebrilla durante el embarazo, ya que el virus puede ser perjudicial tanto para usted como para su bebé. La culebrilla es causada por el virus varicela-zoster, que es el mismo virus que causa la varicela. Si bien la varicela suele ser una enfermedad leve en los niños, puede ser más grave en adultos y mujeres embarazadas.

Si ha tenido varicela antes, ya es inmune al virus varicela-zoster y no corre riesgo de desarrollar culebrilla. Sin embargo, si no ha tenido varicela, corre el riesgo de contagiarla de alguien que tenga culebrilla. Si contrae varicela durante el embarazo, puede provocar complicaciones graves para usted y su bebé, incluidos abortos espontáneos, nacimientos prematuros y defectos de nacimiento.

Por estos motivos, es importante tomar precauciones al trabajar con un cliente con culebrilla. A continuación se ofrecen algunos consejos que le ayudarán a reducir el riesgo de exposición al virus:

- Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, especialmente después del contacto con el cliente o sus pertenencias.

- Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar.

- Utilizar guantes al manipular las pertenencias del cliente o al limpiar su entorno.

- Si es posible, evitar el contacto cercano con el cliente, como abrazarlo o besarlo.

- Quédese en casa y no vaya al trabajo si se siente enfermo.

- Si tiene algún síntoma de varicela, como sarpullido, fiebre o dolor de cabeza, consulte a su médico inmediatamente.

Al tomar estas precauciones, puede ayudar a reducir el riesgo de exposición al virus varicela-zoster y proteger su salud y la de su bebé.