La Ley de Protección del Crédito al Consumidor (CCPA) limita la cantidad de ingresos disponibles de un individuo que se pueden embargar para el pago de una deuda médica al 25% de su salario neto semanal. Este límite aplica a embargos ordenados por un tribunal o agencia estatal, así como aquellos obtenidos a través de acreedores privados con orden judicial.