¿Por qué las fábricas no deberían estar en zonas residenciales?

Contaminación del aire: Las fábricas liberan una variedad de contaminantes al aire, incluidas partículas, compuestos orgánicos volátiles (COV) y contaminantes atmosféricos peligrosos (CAP). Estos contaminantes pueden causar una variedad de problemas de salud, incluidos problemas respiratorios, enfermedades cardíacas y cáncer.

Contaminación del agua: Las fábricas también pueden contaminar las fuentes de agua, como ríos y arroyos, con productos químicos, metales pesados ​​y otros contaminantes. Esto puede hacer que el agua no sea apta para beber, nadar y pescar.

Contaminación acústica: Las fábricas pueden generar mucho ruido, lo que puede resultar molesto para los residentes. Esto puede dificultar el sueño, la relajación y la concentración.

Congestión del tráfico: Las fábricas también pueden provocar congestión del tráfico, especialmente si están ubicadas en zonas concurridas. Esto puede dificultar el desplazamiento de los residentes.

Valores de propiedad: La presencia de una fábrica en una zona residencial también puede afectar negativamente al valor de las propiedades. Esto se debe a que las fábricas pueden hacer que la zona sea menos deseable para vivir.