Es importante mantener la confidencialidad y privacidad del cliente para proteger su información personal y garantizar su confianza en los servicios prestados. Discutir asuntos relacionados con el cliente fuera de las instalaciones puede aumentar el riesgo de acceso no autorizado a información confidencial o su divulgación accidental, comprometiendo potencialmente la privacidad y confianza del cliente. Además, ayuda a mantener los límites profesionales y crea un entorno seguro tanto para los clientes como para los profesionales.