¿Por qué la esquizofrenia comienza en los adolescentes?

La premisa de su pregunta no es del todo exacta. La esquizofrenia generalmente se manifiesta al final de la adolescencia o al comienzo de la edad adulta, con una edad promedio de aparición a mediados de los 20 años. Es poco común que los síntomas de la esquizofrenia surjan durante la niñez.

La razón exacta por la que la esquizofrenia tiende a comenzar durante este período de desarrollo aún no se comprende completamente y sigue siendo un área activa de investigación. Sin embargo, se cree que varios factores contribuyen a la aparición de síntomas esquizofrénicos durante la adolescencia y la edad adulta temprana:

1. Desarrollo del cerebro :Durante la adolescencia y la edad adulta temprana se produce un desarrollo y una reorganización importantes del cerebro. Estos procesos de desarrollo implican la poda del exceso de sinapsis, la mielinización de las fibras nerviosas y la maduración de diversos circuitos y regiones cerebrales. Las anomalías en estos procesos de desarrollo y las consiguientes alteraciones en la conectividad cerebral se han implicado en el desarrollo de la esquizofrenia.

2. Cambios en los neurotransmisores :Los neurotransmisores son sustancias químicas que transmiten señales entre las células cerebrales. En personas con esquizofrenia se han observado desequilibrios o desregulaciones en ciertos neurotransmisores, como la dopamina y el glutamato. Estas anomalías de los neurotransmisores pueden alterar la comunicación y el funcionamiento del cerebro, provocando síntomas como alucinaciones, delirios y dificultades cognitivas.

3. Factores genéticos :La esquizofrenia tiene un fuerte componente genético, con una combinación de múltiples variaciones genéticas que contribuyen al riesgo de desarrollar el trastorno. Estas variaciones genéticas pueden influir en el desarrollo del cerebro y los sistemas de neurotransmisores, aumentando la probabilidad de desarrollar síntomas durante la adolescencia o la edad adulta temprana cuando estos cambios biológicos son pronunciados.

4. Factores ambientales :Ciertos factores ambientales, como la exposición prenatal a toxinas o infecciones, traumas infantiles y acontecimientos vitales estresantes, también se han asociado con un mayor riesgo de desarrollar esquizofrenia. Estos factores pueden interactuar con predisposiciones genéticas para aumentar aún más la vulnerabilidad al trastorno durante la adolescencia y la edad adulta temprana.

Es importante señalar que la esquizofrenia es un trastorno complejo y los factores que contribuyen a su aparición son multifacéticos y están interconectados. Las investigaciones en curso tienen como objetivo comprender mejor los intrincados mecanismos que subyacen al desarrollo de la esquizofrenia en adolescentes y adultos jóvenes, lo que en última instancia ayudará al desarrollo de estrategias de prevención y tratamiento más efectivas.