Según la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA), el rango de temperatura recomendado para la mayoría de los lugares de trabajo interiores es entre 68°F y 76°F. Sin embargo, algunos lugares de trabajo pueden tener requisitos de temperatura específicos según el tipo de trabajo que se realiza. Por ejemplo, los lugares de trabajo donde los empleados están expuestos a fuentes de calor o realizan actividades extenuantes pueden necesitar mantener un rango de temperatura más bajo para prevenir enfermedades relacionadas con el calor. Por el contrario, los lugares de trabajo donde los empleados trabajan en ambientes fríos pueden necesitar mantener un rango de temperatura más alto para prevenir enfermedades relacionadas con el frío.
En general, la temperatura cómoda más alta en el lugar de trabajo es la temperatura a la que los empleados pueden realizar su trabajo de manera segura y eficiente sin experimentar molestias debido al calor. Esta temperatura puede variar según las preferencias de cada empleado, el tipo de trabajo que se realiza y las condiciones ambientales del lugar de trabajo.