¿Qué es un coma inducido?

Un coma inducido, también conocido como coma inducido médicamente o hipotermia terapéutica, es un estado de inconsciencia temporal y deliberado que se induce en los pacientes mediante medicamentos con fines médicos. Implica la depresión controlada de la actividad cerebral, que normalmente se logra mediante la administración de fármacos sedantes o anestésicos.

Los comas inducidos se inducen médicamente por diversos motivos:

Hipotermia Terapéutica :Para los pacientes que han sufrido un paro cardíaco o una lesión cerebral grave, el coma inducido puede ayudar a reducir el metabolismo cerebral, prevenir más daños a las células cerebrales y mejorar las posibilidades de recuperación. La reducción de la temperatura corporal ralentiza la tasa metabólica del cuerpo y ayuda a reducir la demanda de oxígeno y energía del cerebro.

Estado epiléptico resistente al tratamiento :En casos de estado epiléptico, una serie prolongada o continua de convulsiones, se puede inducir un coma inducido para controlar la actividad convulsiva y brindar al cerebro la oportunidad de descansar.

Infecciones graves :En condiciones críticas, como la sepsis grave, donde la inflamación y la disfunción orgánica pueden poner en peligro la vida, un coma inducido puede permitir un mejor control de las funciones vitales, incluido el mantenimiento de la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la respiración.

Manejo de la presión intracraneal :En casos que implican un aumento de la presión intracraneal (PIC) debido a afecciones como inflamación o hemorragia cerebral, se puede inducir un coma inducido para reducir el metabolismo cerebral, disminuir la PIC y mejorar la perfusión cerebral.

Descanso para el paciente :En algunos casos, especialmente para pacientes que se someten a procedimientos médicos complejos o que están gravemente enfermos, un coma inducido puede proporcionar un estado de reposo controlado para ayudar en su recuperación.

Los profesionales médicos consideran cuidadosamente la decisión de inducir un coma en función de la condición y el pronóstico de cada paciente. Los comas inducidos generalmente se controlan de cerca y se despierta gradualmente al paciente cuando la necesidad médica ha pasado.