¿Qué llena el espacio vacío del cráneo después de una hemisferectomía cerebral?

Después de la extirpación de un hemisferio cerebral en una hemisferectomía cerebral, el espacio vacío del cráneo se llena con una combinación de líquido cefalorraquídeo (LCR), tejido conectivo blando y, a veces, el crecimiento de tejido cerebral nuevo.

1. Líquido cefalorraquídeo:el LCR es un líquido transparente que rodea y protege el cerebro y la médula espinal. Después de la hemisferectomía, el hemisferio restante puede desplazarse para llenar parte del espacio, creando espacio para que el LCR se acumule y llene el espacio vacío del cráneo.

2. Tejido conectivo blando:a medida que el cerebro sana y se adapta a la pérdida de un hemisferio, el espacio vacío puede llenarse con tejidos conectivos blandos como las membranas aracnoides y la piamadre. Estas membranas brindan soporte y protección al tejido cerebral restante.

3. Crecimiento de tejido nuevo:en algunos casos, el tejido cerebral restante puede regenerarse hasta cierto punto. Este proceso, conocido como "reorganización cerebral post-hemisferectomía", puede conducir a la formación de nuevas conexiones neuronales y compensación funcional por parte del hemisferio restante.

4. Remodelación del cráneo:con el tiempo, el propio cráneo puede sufrir una remodelación en respuesta a la pérdida del cerebro. El hueso puede adelgazarse y el espacio vacío puede reducirse a medida que el cerebro se adapta y se desplaza para llenar el espacio disponible.

Es importante tener en cuenta que los resultados específicos después de una hemisferectomía pueden variar según factores individuales, como la edad del paciente, la causa de la hemisferectomía y el nivel de atención y rehabilitación postoperatoria.