Por qué la pandemia ha impulsado el auge de la cirugía estética
El aumento del estrés y la ansiedad causados por la pandemia han pasado factura a la salud física y mental de las personas. Algunos han recurrido a procedimientos cosméticos como una forma de afrontar estos factores estresantes y sentirse mejor consigo mismos.
Más tiempo en casa
Los confinamientos y las órdenes de quedarse en casa dieron más tiempo a las personas para reflexionar sobre su apariencia. Al pasar más horas frente a la cámara para reuniones virtuales y eventos sociales, las personas se volvieron cada vez más conscientes de sus rasgos faciales y apariencia general, lo que llevó a muchos a considerar mejorar su apariencia mediante procedimientos cosméticos.
Telemedicina y Consultas Virtuales
Los avances en la telemedicina han facilitado que las personas consulten con cirujanos plásticos y realicen consultas virtuales desde la comodidad de sus hogares. Esta comodidad ha acelerado el proceso de programación y planificación de procedimientos cosméticos.
Menores gastos de viaje y entretenimiento
La reducción de viajes, cenas y otros gastos discrecionales durante la pandemia ha dejado a algunas personas con más ingresos disponibles. Esta flexibilidad financiera les ha permitido invertir en cuidados personales y priorizar tratamientos estéticos que quizás no habían considerado antes.
Mayor enfoque en el cuidado personal y el bienestar
La pandemia enfatizó la importancia del autocuidado y el bienestar general. Los procedimientos cosméticos que mejoran la apariencia y aumentan la confianza pueden verse como una forma de cuidado personal y una forma de combatir el estrés relacionado con la pandemia.
Asequibilidad percibida durante una recesión
Si bien la pandemia provocó dificultades económicas para muchos, algunas personas experimentaron ingresos estables o incluso mayores durante este período. Para estas personas, los procedimientos cosméticos pueden parecer más asequibles debido a la reducción de los gastos discrecionales asociados con la pandemia.
Influencia de las redes sociales
El auge de las plataformas de redes sociales y la proliferación de filtros de belleza han influido en los ideales y expectativas sociales con respecto a la apariencia. Esta tendencia actual, junto con el mayor tiempo frente a la pantalla durante la pandemia, intensificó aún más el deseo de mejoras cosméticas.