Osteoartritis de rodilla:cómo asegurarse de que el 'Ouch' no gane

1. Controle su peso. La obesidad es un factor de riesgo importante para la osteoartritis de rodilla. Perder peso puede ayudar a reducir la carga sobre las rodillas y ralentizar la progresión de la enfermedad.

2. Haga ejercicio con regularidad. El ejercicio puede ayudar a fortalecer los músculos alrededor de las rodillas y mejorar la flexibilidad de las articulaciones. Sin embargo, es importante elegir ejercicios de bajo impacto que no ejerzan demasiada presión sobre las rodillas. Algunas buenas opciones incluyen caminar, nadar y andar en bicicleta.

3. Aplique calor o hielo. El calor puede ayudar a aliviar el dolor y la rigidez de las rodillas. El hielo también puede ser útil, especialmente si tienes hinchazón.

4. Eleva las piernas. Elevar las piernas puede ayudar a reducir la hinchazón y mejorar la circulación.

5. Medias de compresión. Las medias de compresión pueden ayudar a reducir la hinchazón y mejorar la circulación.

6. Analgésicos de venta libre. Los analgésicos de venta libre, como el ibuprofeno o el paracetamol, pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.

7. Analgésicos tópicos. Los analgésicos tópicos, como cremas o geles, se pueden aplicar directamente en las rodillas para ayudar a aliviar el dolor.

8. Fisioterapia. La fisioterapia puede ayudar a mejorar la fuerza y ​​la flexibilidad de las rodillas y reducir el dolor.

9. Dispositivos de asistencia. Los dispositivos de asistencia, como un bastón o un andador, pueden ayudar a reducir la carga sobre las rodillas y facilitar el caminar.

10. Cirugía. La cirugía puede ser necesaria si otros tratamientos no brindan un alivio adecuado del dolor.

Si sigue estos consejos, podrá ayudar a controlar la osteoartritis de rodilla y evitar que el “ay” gane.