¿Qué esperar de una cirugía MPFL?

La cirugía del ligamento femororrotuliano medial (MPFL) es un procedimiento para reparar un MPFL desgarrado o dañado, que es un ligamento que conecta la rótula (rótula) con el hueso del muslo (fémur). El MPFL ayuda a mantener la rótula en su lugar y evitar que se disloque.

Antes de la cirugía

Su médico ordenará pruebas de imágenes, como una radiografía o una resonancia magnética, para confirmar el diagnóstico de un MPFL desgarrado. También es posible que le pidan que asista a una sesión de fisioterapia para evaluar la fuerza de su rodilla y su rango de movimiento.

Durante la cirugía

La cirugía MPFL generalmente se realiza como un procedimiento ambulatorio, lo que significa que podrá regresar a casa el mismo día. La cirugía se realiza bajo anestesia general, por lo que usted estará dormido y sin dolor durante el procedimiento.

El cirujano hará una pequeña incisión sobre la rodilla y luego utilizará una variedad de técnicas para reparar el MPFL desgarrado. Esto puede implicar volver a suturar el ligamento desgarrado o utilizar un injerto de otra parte del cuerpo.

Después de la cirugía

Después de la cirugía, le colocarán un yeso o un aparato ortopédico para proteger su rodilla. También le darán analgésicos para ayudar a controlar su dolor. Es posible que pueda comenzar la fisioterapia unos días después de la cirugía para ayudarlo a recuperar su fuerza y ​​rango de movimiento.

Recuperación

El tiempo de recuperación de la cirugía MPFL suele tardar varios meses. Es posible que necesite usar muletas o un andador durante varias semanas después de la cirugía. También deberá evitar actividades que ejerzan presión sobre la rodilla, como correr o saltar.

La mayoría de las personas pueden recuperarse completamente de la cirugía MPFL y regresar a sus actividades normales. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar dolor persistente o inestabilidad en la rodilla.

Riesgos de la cirugía

Como ocurre con cualquier cirugía, existen riesgos asociados con la cirugía MPFL. Estos riesgos incluyen:

* Infección

* Sangrado

* Coágulos de sangre

*Daño a los nervios o vasos sanguíneos.

* Fallo de la reparación para sanar adecuadamente

* Dolor persistente o inestabilidad en la rodilla.

Es importante analizar los riesgos y beneficios de la cirugía MPFL con su médico antes de tomar la decisión de someterse a la cirugía.