¿Qué es el metronidazol?
Actividad antimicrobiana:
El metronidazol exhibe una potente actividad antimicrobiana contra las bacterias anaeróbicas, que son microorganismos capaces de sobrevivir en ambientes sin oxígeno. Mata o inhibe el crecimiento de un amplio espectro de bacterias anaeróbicas, incluidas especies de Bacteroides, Fusobacterium, Clostridium y Peptococcus, lo que la convierte en una valiosa opción de tratamiento para las infecciones anaeróbicas.
Efectos antiprotozoarios:
Además de sus efectos antibacterianos, el metronidazol es muy eficaz contra los parásitos protozoarios. Ejerce actividad protozoácida contra Giardia lamblia, Trichomonas vaginalis y Entamoeba histolytica, lo que lo convierte en una opción común en el tratamiento de la giardiasis, la tricomoniasis y la amebiasis.
Mecanismo de acción:
Las acciones antimicrobianas y antiprotozoarias del metronidazol resultan principalmente de su interferencia con el ADN del microorganismo. El grupo nitro del fármaco se reduce, generando intermediarios reactivos que alteran la estructura del ADN e inhiben la síntesis de ácido nucleico, lo que en última instancia conduce a la muerte celular.
Farmacocinética:
El metronidazol se absorbe bien después de la administración oral y logra una amplia distribución en los fluidos y tejidos corporales, incluidos el cerebro y el sistema nervioso central. Sufre metabolismo hepático y su eliminación se produce tanto por la orina como por las heces.
Espectro de indicaciones:
El metronidazol se usa comúnmente en el tratamiento de una variedad de infecciones, que incluyen:
- Infecciones bacterianas anaeróbicas, como abscesos intraabdominales, peritonitis, enfermedad inflamatoria pélvica e infecciones quirúrgicas.
- Infecciones por protozoarios, como giardiasis, tricomoniasis, infecciones vaginales causadas por Trichomonas vaginalis y amebiasis.
- Tratamiento de Helicobacter pylori, asociado a úlceras pépticas.
- Diarrea asociada a antibióticos causada por infección por Clostridium difficile (diarrea asociada a C. difficile).
El metronidazol generalmente se administra por vía oral y su uso generalmente depende de la naturaleza de la infección, el agente causal y la condición individual del paciente. Es esencial seguir el régimen de dosificación prescrito, completar el tratamiento completo según lo recomendado por el profesional de la salud e informar cualquier efecto secundario o inquietud durante el tratamiento.