¿A qué te refieres con deformidades posturales?

Deformidades posturales , también conocidas como deformidades musculoesqueléticas, se refieren a posiciones anormales del cuerpo o de ciertas partes del cuerpo debido a desequilibrios o desviaciones estructurales en el sistema musculoesquelético. Estas deformidades pueden afectar la columna, las extremidades, las articulaciones y otras estructuras esqueléticas.

Las deformidades posturales pueden ser causadas por una variedad de factores, que incluyen:

- Condiciones genéticas :Algunas personas pueden estar predispuestas a ciertas deformidades posturales debido a anomalías hereditarias en el desarrollo óseo o la función muscular.

- Trastornos neuromusculares :Los trastornos neurológicos que afectan el tono y el control de los músculos, como la parálisis cerebral o la distrofia muscular, pueden contribuir a las deformidades posturales.

- Trauma :Las lesiones, fracturas u otros eventos traumáticos pueden dañar huesos, músculos o ligamentos, provocando posturas anormales o deformidades.

- Factores ocupacionales :La exposición prolongada a movimientos repetitivos o posiciones corporales incómodas en determinadas ocupaciones puede tensar los músculos y las articulaciones, lo que provoca deformidades posturales.

- Mala postura :Las posturas habituales, como encorvarse o inclinarse hacia un lado, pueden ejercer presión sobre la columna y provocar desviaciones posturales con el tiempo.

Los tipos comunes de deformidades posturales incluyen:

1. Escoliosis: Se trata de una curvatura lateral de la columna que puede tener forma de C, de S o una combinación de ambas. A menudo se diagnostica durante la adolescencia y puede variar en gravedad.

2. Cifosis: También conocida como jorobada, la cifosis es un redondeo exagerado de la parte superior de la columna, lo que provoca una apariencia encorvada. Puede ser congénito (presente al nacer) o desarrollarse más adelante en la vida debido a factores como la osteoporosis o una mala postura.

3. Lordosis: Se trata de una curvatura excesiva hacia adentro de la parte inferior de la columna, a menudo denominada inclinación hacia atrás. Puede ser causada por músculos abdominales débiles o ciertas condiciones médicas.

4. Pies planos (Pes Planus): El pie plano se produce cuando el arco del pie se colapsa, provocando que toda la planta del pie toque el suelo al estar de pie. Esto puede provocar dolor en el pie, malestar y posibles desequilibrios posturales.

5. Rodillas Knock (Genu Valgum): Esta afección se caracteriza por la flexión de las rodillas hacia adentro al estar de pie con los pies juntos. Es común en los niños y puede resolverse a medida que crecen, pero en algunos casos puede persistir.

6. Patas arqueadas (Genu Varum): En esta deformidad, las piernas se curvan hacia afuera a la altura de las rodillas, provocando una apariencia de piernas arqueadas. También se observa con mayor frecuencia en niños y generalmente mejora a medida que se desarrollan.

7. Tortícolis: La tortícolis se refiere a una posición anormal de la cabeza debido a desequilibrios musculares en el cuello. Puede ser congénito o adquirido y puede hacer que la cabeza se incline hacia un lado o que el mentón apunte hacia un hombro.

Las deformidades posturales pueden variar de leves a graves y el enfoque de tratamiento depende de la afección específica y sus causas subyacentes. El tratamiento puede implicar fisioterapia, ejercicios correctivos, aparatos ortopédicos o soportes y, en algunos casos, intervención quirúrgica. La detección y el tratamiento tempranos son esenciales para minimizar el impacto de las deformidades posturales en la salud general, la movilidad y la calidad de vida de un individuo.