¿Por qué se utilizó amianto en el pasado?
1. Resistencia al calor: Las fibras de asbesto son naturalmente resistentes al calor, lo que las hace ideales para el aislamiento en edificios y entornos industriales. Esta propiedad proporcionó protección contra incendios y eficiencia energética.
2. Durabilidad y resistencia: El amianto es conocido por su resistencia y durabilidad. Sus fibras son fuertes y resistentes al desgaste, al desgarro y a los productos químicos. Esto lo hizo útil para fabricar materiales de construcción como techos, pisos y revestimientos.
3. Aislamiento eléctrico: Las fibras de amianto no son conductoras y se empleaban comúnmente como aislantes eléctricos en cableado, tableros de distribución y paneles eléctricos.
4. Absorción del sonido: El amianto tiene propiedades de insonorización, lo que lo hace adecuado para su uso en teatros, auditorios y otros espacios sensibles al sonido.
5. Aplicaciones textiles: Debido a su naturaleza resistente al fuego, el amianto se utilizaba en la fabricación de textiles como ropa, guantes y cortinas ignífugas.
6. Resistencia a la fricción: Se agregaron fibras de asbesto a las pastillas de freno y a los revestimientos del embrague de los vehículos para mejorar su rendimiento y durabilidad.
7. Productos de fibrocemento: El asbesto se combinó con cemento para crear materiales de construcción livianos y duraderos, como láminas corrugadas para techos, tuberías y tejas.
8. Aplicaciones decorativas: Algunos tipos de amianto, como el crisotilo, se utilizaban con fines decorativos. Debido a su textura sedosa, el crisotilo se encontraba en pinturas decorativas, texturas de paredes y revestimientos.
9. Rentabilidad: Antes de descubrir sus riesgos para la salud, el amianto se consideraba un material de costo relativamente bajo, lo que lo hacía económicamente ventajoso para diversas industrias.
Es importante señalar que, si bien el asbesto se utilizó ampliamente en el pasado, su uso ha disminuido significativamente debido a la evidencia bien establecida que lo vincula con diversos riesgos para la salud, incluidos el cáncer de pulmón, la asbestosis y otras enfermedades respiratorias. En muchos países, el uso de amianto está actualmente estrictamente regulado o prohibido por completo debido a su naturaleza peligrosa.