¿A qué sabe la tierra?

Por lo general, la suciedad no está destinada a comerse y no tiene un sabor específico como tal. Si sientes un sabor a tierra, puede variar según el tipo y la composición del suelo. Puede tener una variedad de sabores, texturas y aromas. Algunas personas lo describen como de sabor terroso, metálico o ligeramente amargo, mientras que otras pueden percibirlo como suave o sin mucho sabor. La tierra también puede tener diferentes texturas, como arenosa, polvorienta o arcillosa, lo que puede contribuir a la experiencia gustativa. Es importante tener en cuenta que consumir tierra puede no ser seguro y podría introducir microorganismos dañinos u otras sustancias en el cuerpo.