¿Cuáles son los síntomas del liquen simple crónico?
Los síntomas del liquen simple crónico incluyen:
- Un parche de piel persistente con picazón que puede estar enrojecido, escamoso y engrosado.
- La piel afectada puede estar seca, agrietada y correosa.
- La picazón puede empeorar por la noche o cuando la piel está caliente o sudorosa.
- El área afectada puede rascarse en carne viva y sangrar.
- La piel puede infectarse con bacterias u hongos.
- El liquen simple crónico puede afectar cualquier zona del cuerpo, pero es más común en brazos, piernas, cuello y cuero cabelludo.