¿La mordedura menor de gato causa rabia?

Si bien una mordedura menor de gato puede no parecer grave inicialmente, es importante comprender que incluso las heridas pequeñas pueden transmitir la rabia. La gravedad y la profundidad de la mordedura no siempre se correlacionan con el riesgo potencial de transmisión de la rabia, y cualquier mordedura de un animal infectado, independientemente de su tamaño, debe tomarse en serio.

La rabia es una enfermedad viral mortal que afecta al sistema nervioso central y se transmite a través de la saliva de animales infectados. Una vez que aparecen los síntomas, la rabia casi siempre es fatal. Por lo tanto, es fundamental tomar medidas inmediatas tras cualquier posible exposición.

Si un gato lo ha mordido o arañado, incluso si parece una lesión menor, debe inmediatamente:

1. Lave bien la herida con agua y jabón durante al menos 15 minutos.

2. Aplique presión para detener el sangrado, si está presente.

3. Eleve el área lesionada para reducir la hinchazón.

4. Busque atención médica lo antes posible.

El profesional médico evaluará la gravedad de la mordedura, evaluará el riesgo de transmisión de la rabia en función del historial de vacunación del animal y la posible exposición a la rabia, y recomendará el tratamiento adecuado. Esto puede incluir la administración de profilaxis antirrábica (PEP), que implica una serie de vacunas para prevenir la aparición de la enfermedad.

Es fundamental seguir el curso prescrito de PEP para garantizar una protección eficaz contra la rabia. Además, es importante controlar al gato que muerde para detectar signos de enfermedad o comportamiento anormal durante los siguientes 10 días. Si se observa algún síntoma preocupante, comuníquese inmediatamente con su proveedor de atención médica.

Recuerde que la rabia es una enfermedad prevenible y que la atención médica inmediata y el manejo adecuado de las heridas son fundamentales para minimizar el riesgo de infección y prevenir consecuencias graves.