Cómo funcionan los inhibidores de JAK
Las JAK se activan cuando se unen a citoquinas específicas o factores de crecimiento, lo que lleva a la fosforilación de moléculas de señalización posteriores llamadas transductores de señal y activadores de la transcripción (STAT). Luego, los STAT se trasladan al núcleo, donde regulan la expresión de varios genes implicados en las respuestas inmunitarias, la inflamación y el crecimiento celular.
Los inhibidores de JAK bloquean la activación de JAK al prevenir su fosforilación, inhibiendo así la cascada de señalización descendente y, en última instancia, reduciendo la producción de mediadores inflamatorios y la proliferación de ciertas células inmunes. Esta interferencia con la señalización de JAK-STAT hace que los inhibidores de JAK sean eficaces en el tratamiento de afecciones caracterizadas por respuestas inmunitarias e inflamación excesivas, como la artritis reumatoide, la enfermedad inflamatoria intestinal y ciertos tipos de cáncer.
Algunos ejemplos de inhibidores de JAK incluyen tofacitinib (Xeljanz), baricitinib (Olumiant) y ruxolitinib (Jakafi), que se usan comúnmente para tratar la artritis reumatoide y otros trastornos mediados por el sistema inmunológico. Por lo general, se administran por vía oral y pueden usarse solos o en combinación con otros medicamentos.