¿Cómo debilita la leucemia el sistema inmunológico?
1. Proliferación de células malignas: En la leucemia, hay una sobreproducción y acumulación de glóbulos blancos anormales, principalmente linfocitos inmaduros (leucemia linfoblástica) o células mieloides (leucemia mieloide). Estas células malignas pueden desplazar y suprimir la producción y función de las células inmunes normales, como los linfocitos, los neutrófilos y los macrófagos.
2. Hematopoyesis alterada: La leucemia afecta la médula ósea, que es el sitio principal de producción de células sanguíneas. La proliferación de células leucémicas altera el proceso normal de hematopoyesis, lo que provoca una disminución en la producción de células inmunitarias sanas. Esto puede dar lugar a una reducción del número de células T funcionales, células B y células asesinas naturales (NK), que son cruciales para las respuestas inmunitarias contra infecciones y células cancerosas.
3. Actividad disfuncional de las células inmunitarias: La leucemia puede afectar la función y la maduración de las células inmunitarias, incluso si su número no disminuye significativamente. Las células malignas pueden liberar sustancias que alteran las vías de señalización y la comunicación entre las células inmunitarias, afectando su capacidad para reconocer y responder a antígenos y patógenos extraños.
4. Esplenomegalia y hepatomegalia: En algunos casos de leucemia, el bazo y el hígado aumentan de tamaño (esplenomegalia y hepatomegalia). Estos órganos desempeñan funciones importantes en la vigilancia inmunitaria y la eliminación de patógenos del torrente sanguíneo. Su agrandamiento puede afectar su función y debilitar aún más la capacidad del sistema inmunológico para combatir infecciones.
5. Mayor riesgo de infecciones: Como resultado del sistema inmunológico comprometido, las personas con leucemia son más susceptibles a las infecciones. Pueden experimentar infecciones recurrentes o graves causadas por bacterias, virus, hongos o infecciones oportunistas que se aprovechan de las defensas inmunitarias debilitadas.
6. Trastornos autoinmunes: La leucemia también puede alterar la regulación inmune normal, lo que lleva al desarrollo de trastornos autoinmunes. En estas condiciones, el sistema inmunológico ataca por error los propios tejidos del cuerpo, lo que provoca diversos síntomas y complicaciones.
El sistema inmunológico debilitado asociado con la leucemia aumenta el riesgo de infecciones y otras complicaciones, lo que contribuye a la morbilidad y mortalidad general de la enfermedad.