¿Qué es una radiografía?

Los rayos X son una forma de radiación electromagnética, al igual que la luz visible, pero con longitudes de onda mucho más cortas. Esto significa que pueden atravesar objetos que la luz visible no puede, como huesos y metales. Los rayos X se utilizan en una variedad de aplicaciones, incluidas imágenes médicas, controles de seguridad e inspección industrial.

En imágenes médicas, los rayos X se utilizan para crear imágenes del interior del cuerpo. Esto puede resultar útil para diagnosticar lesiones y enfermedades, como fracturas de huesos, neumonía y cáncer. Los rayos X también se utilizan para guiar procedimientos médicos, como la cirugía y la radioterapia.

En los controles de seguridad, los rayos X se utilizan para escanear equipaje, paquetes y personas en busca de contrabando, como armas y explosivos. Los rayos X también se utilizan para detectar amenazas a la seguridad en aeropuertos, edificios gubernamentales y otros lugares sensibles.

En la inspección industrial, los rayos X se utilizan para comprobar si hay defectos en materiales y productos. Esto puede resultar útil para garantizar que los productos sean seguros y cumplan con los estándares de calidad. Los rayos X también se utilizan para inspeccionar daños ocultos, como grietas y corrosión.

Los rayos X son una herramienta poderosa que se puede utilizar para una variedad de propósitos. Sin embargo, es importante utilizar los rayos X de forma segura. Los rayos X pueden dañar las células y el ADN, por lo que es importante limitar la exposición a los rayos X.